El tema de los privilegios jubilatorios en nuestro país motivó el año pasado una prédica de nuestra Fundación.
En esa oportunidad dijimos lo siguiente:
SUSTENTABILIDAD, RAZONABILIDAD, LEGITIMIDAD
Dra.
Rita Sessa - Fecha: 22 Ago 2011
"[...] hoy en nuestra querida Patria, existen sectores que gozan de diferencialidades privilegiadas.
Las mismas son legales, pero se soslaya con ellas principios de justicia y equidad, es decir son de discutible legitimidad."
¡DERECHOS SÍ, PRIVILEGIOS, NO!
Dr.
Osvaldo Loisi - Fecha: 05 Dic 2011
"No puede sentirse del todo bien quien sabe que el monto de su jubilación, adquirida en función de servicios especiales, es centenares de veces mayor que la de un obrero que ha trabajado toda su vida.
En momentos en que es necesario restringir los gastos del erario público, esos personajes debieran notar la afrenta social que implica tamaña desproporción, contribuyendo con una quita solidaria, sin esperar a que una ley valiente –que en algún momento, sin duda, se sancionará- acabe con esa injusticia".
Leemos en un matutino del 16-5-2012 que Diego Bossio, titular de la ANSES, planteó en el Congreso Nacional la necesidad de terminar con los regímenes jubilatorios de privilegio y con los fallos que dan lugar a haberes sin tope.
Indicó que estos regímenes jubilatorios "son desigualdades que no debe convalidar el Estado, sobre todo en algunos sectores que ni siquiera pagan el Impuesto a las Ganancias".
Apuntó a las jubilaciones de Jueces, miembros del Servicio Exterior de la Nación, y Obispos.
También apuntó a ciertas sentencias judiciales que generan retroactivos millonarios y haberes recalculados por arriba del tope general (de 12.359 pesos en este momento).
El monto de la jubilación más alta que se paga hoy en el país es de 112.121 pesos mensuales, y según informa el matutino, se trataría de uno de los máximos directivos de Adeba, la asociación de bancos privados de capital nacional.
Es loable y celebramos que de una vez por todas se decida terminar con ominosos privilegios y sentimos gran satisfacción por haber sido escuchados.
Esperamos que se haga realidad la manda constitucional que establece que todos los habitantes son iguales ante la ley e impone afianzar la justicia.